La Ley de CHIPS de Estados Unidos y sus implicaciones para el mundo
mayo 9, 2023 - by Redacción Economía, Geopolítica, Revolución digital
Operación Estratégica.
La Ley de CHIPS (Creating Helpful Incentives to Produce Semiconductors, por sus siglas en inglés) es una ley recientemente aprobada el 6 de agosto de 2022, en los Estados Unidos con el objetivo de impulsar la producción de semiconductores en el país. Esta ley es una respuesta a la escasez global de semiconductores que ha afectado a muchas industrias, incluyendo la automotriz y la electrónica.
La Ley de CHIPS establece un fondo de $52 mil millones para apoyar la investigación y el desarrollo de semiconductores en los Estados Unidos. Este fondo será utilizado para financiar proyectos de investigación y desarrollo, así como para establecer centros de fabricación de semiconductores en el país. La legislación también establece incentivos fiscales para las empresas que inviertan en la producción de semiconductores dentro del territorio estadounidense.
Las implicaciones de la Ley de CHIPS para el mundo son significativas. En primer lugar, es probable que tenga un impacto en la cadena de suministro global de semiconductores, por ejemplo, con el aumento de la producción en la región estratégica de Norteamérica, es posible que las empresas que anteriormente habían dependido de los suministros de semiconductores de otros países, como China y Taiwán, tengan que reevaluar su cadena de suministro.
Además, los cambios esperados por la entrada en vigor de las nuevas medidas estadounidenses, pueden tener implicaciones para las relaciones comerciales y políticas entre los Estados Unidos y otros países. En particular, es posible que la ley se perciba como una medida proteccionista, lo que podría dar lugar a mayores tensiones comerciales en un mundo cada vez más fragmentado. También es posible que algunos países, especialmente aquellos que actualmente son importantes proveedores de semiconductores, respondan con medidas similares, como incentivos para la producción de semiconductores en sus propios países.
Sin embargo, la Ley de CHIPS también puede tener implicaciones positivas para el mundo. Con la producción de más semiconductores en los Estados Unidos y en los países de la región de Norteamérica (México y Canadá), es posible que se reduzca la dependencia de los suministros de semiconductores de otros países, lo que podría aumentar la estabilidad y la seguridad en la cadena de suministro global en ciertas regiones para ciertos intereses. Además, estos cambios impulsados desde E.U.A. podrían impulsar la innovación y la competencia en el mercado global de semiconductores, lo que podría resultar en productos mejores y más baratos para los consumidores.
En conclusión, la legislación en materia de semiconductores de los Estados Unidos tiene implicaciones significativas para el mundo. Si bien es posible que la ley genere tensiones comerciales y políticas, también puede tener un impacto positivo en la cadena de suministro global, en la innovación y la competencia en el mercado. Será interesante ver cómo evoluciona la situación y cómo los países y las empresas responden a los cambios en la producción de este componente tecnológico indispensable en prácticamente todas las industrias de manufactura avanzada de mayor valor agregado para las economías nacionales, como la de México.
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